Hace ya varias semanas semanas hicimos un #Cinetflix dedicado al humor, justo antes de que la realidad actual nos quitara de tajo las ganas de reírnos. Decidí poner mi recomendada de ese momento solo porque, quizás, en medio de tanta desazón, reír un poco pueda ayudar a no rendirse del todo, a mantener de alguna manera la llama de la esperanza.

En ese momento mi recomendada fue Mi nombre es Dolemite que, tengo la sensación no fue ni muy comentada ni reseñada por estos lares.

La película cuenta la historia de un personaje real: Rudy Ray Moore, un comediante, cantante, actor y productor de cine fallecido en el 2008 y quien fuera una figura importante del género blaxploitation. Este surgió y tuvo su auge en lo años 70. Eran películas de acción, generalmente de bajo presupuesto con protagonistas afroamericanos que encarnaban hombres duros. Había persecuciones en carro, peleas utilizando artes marciales y funk, soul o jazz de banda sonora.

Por esa época Rudy Ray Moore que había fracasado como cantante y humorista creó un personaje, el proxeneta Dolemite, inspirado en historias que circulaban por las calles plagadas de juegos de palabras con doble sentido y groserías. Fue un éxito rotundo. Las boletas de sus presentaciones se agotaban y sus discos recopilando las rutinas cómicas se vendían como pan caliente.

El encargado de personificar Rudy es Eddie Murphy que tras ser una estrella de la comedia en los 80 y 90 reaparece en el que podría ser su mejor papel. El, como Dolemite en su momento, parece resurgir de las cenizas.

La película capta el espíritu de los 70 y las divisiones culturales existentes entre blancos y negros, como en la escena en la que Rudy va al cine con ganas de divertirse y escoge ver la muy alabada comedia The Front page de Billy Wilder que no le produce ni media carcajada. Desencantado ve con sorpresa a los blancos desternillarse de la risa con chistes que le parecen sosos y aburridos. Ese no es su público, él conecta con quienes no se sienten identificados con ese tipo de humor y para llegarle a más personas debe, como Wilder, hacer una película.

El elenco es impresionante: Keegan-Michael Key, Snoop Dogg , Da´vine Joy, encarnando a la increíble Lady Reed que rompió estereotipos en el cine y Wesley Snipes como el actor y director Martin D´Urville, entre otras sorpresas.

Las risas están garantizadas desde el inicio con la creación de Dolemite, su paso por los salones de comedia y después cuando este decide incursionar en el cine sin tener ningún conocimiento previo.

¿Quién fue Ruy Ray Moore? ¿Por qué lo consideran el padrino del rap y cómo se convirtió en un actor y productor de películas? Mi nombre es Dolemite responde esas preguntas y alcanza a tocar otros temas muy actuales como la discusión sobre lo políticamente correcto.