Hay historias de 52 años de un país en guerra que poco han escuchado sus mismos habitantes: las de aquellos colombianos que en los parajes más recónditos no desistieron en la protección de sus tierras y sus comunidades. Que a pesar del miedo y las intimidaciones del conflicto armado resistieron sin responder con más violencia, sino con el diálogo.
Ocho experiencias de comunidades y organizaciones sociales de todo el país inspiraron ¡De otra manera! Fábulas sobre acuerdos en Colombia, una serie de fascículos coleccionables que a través de metáforas e ilustraciones de la biodiversidad colombiana quieren llevar a las aulas de clase y a los hogares una reflexión sobre la construcción de paz y reconciliación.
“Pensamos que el conflicto armado es una temática dura, pero ¡De otra manera! nos muestra que en situaciones muy complejas, donde parecería que no hay solución, puede ser el momento para pensar, innovar y buscar una salida distinta”, cuenta Catalina Buitrago, profesora de Ciencias Sociales e investigadora de ClickArte, la agencia de pedagogía que apoyó la creación y diseño de esta iniciativa.
Los escenarios reales de estas historias son Carare, en el Magdalena Medio; Briceño, en Antioquia; Valle Encantado, en Córdoba; Norte del Cauca y Montes de María; Cañón de las Hermosas, en el sur de Tolima; Remolinos, en Caquetá, y Tumaco, en Nariño.
Allí viven estos personajes que superaron las diferencias con quienes consideraban sus enemigos. Están los campesinos que lograron un acuerdo con los actores armados para que no los involucraran en sus disputas, las madres valientes que reclamaron a los paramilitares por sus hijos reclutados; la unión de exguerrilleros, militares y campesinos para desminar un territorio, o la experiencia de una comunidad que volvió a su territorio para reconstruirlo.
Para Diana Ospina, autora de las fábulas ¡De otra manera!, la mejor forma de proyectar sus voces fue a través de animales endémicos de los ecosistemas de estas regiones. “Los animales permiten que las personas se identifiquen con los personajes, más allá de los prejuicios o preconcepciones por su género o la región de donde vienen. También les permitirá a los lectores aprender sobre la rica flora y fauna que tenemos en nuestro país”.
Las fábulas están acompañadas de preguntas y actividades que permitirán ahondar sobre la manera en la que se generan y resuelven los conflictos. La finalidad es entender las emociones y ponerse en los zapatos del otro, analizar posiciones contrarias y encontrar maneras distintas de superarlos.
La creación de estos fascículos rescata las teorías de construcción de paz del académico de la Universidad de Notre Dame, John Paul Lederach, según explica Emmanuel Neisa, director de contenidos de ClickArte. «El acto creativo de las comunidades, es decir, cómo y cuáles fueron esos momentos en los que imaginaron una idea que cambió el conflicto fue nuestro hilo. Ahí empezamos a buscar ocho experiencias, en las cinco regiones de Colombia, con las que pudiéramos hacer ese acento en el momento creativo que cambia la dinámica de la guerra.»
Las ocho historias salen cada viernes de forma gratuita en la versión impresa de El Espectador desde el 28 de septiembre.
Esta es una iniciativa creada por Colombia2020 y ClickArte con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (Pnud), la Unión Europea y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados (Acnur).