Esta semana, mi gran noticia, es que “Dheepan”, de Jacques Audiard, ganadora de la Palma de Oro en Cannes en el 2015, se encuentra disponible en Netflix como lo anuncié en el #Cinetflix del pasado domingo.
La película cuenta la historia de Dheepan, un soldado de los Tigres Tamiles durante la guerra civil en Sri Lanka que decide buscar asilo en Francia.
Él sabe que es más fácil obtenerlo siendo una familia así que busca a una mujer y a una niña, que no se conocen entre sí, para construir esa mentira. La puesta en escena les funciona y son acogidos en Francia en donde están obligados a convivir, así sin saber casi nada los unos de los otros, como familia mientras intentan adaptarse, cada uno a su manera, a una nueva cultura.
“Dheepan” es pues muchas películas en una: es un relato sobre la inmigración y sus dificultades. Sobre huir de una violencia para llegar a otra, en este caso la de un suburbio parisino y una aproximación a lo que significa conocer a otro, acercarse a sus secretos, dolores y vislumbrar, de repente, instantes de ternura.
Gran parte del peso de la historia cae en el protagonista, Jesuthasan Antonythasan quien fue, en la vida real, niño soldado en Sri Lanka y llegó asilado a Francia en donde se convirtió en escritor y actor. Sin duda su pasado le permite interpretar al atribulado Dheepan mientras este realiza un profundo viaje interno de confrontación y autodescubrimiento para poder quedar en paz. Kalieaswari Srinivasan interpreta a la mujer, Yalini, y Claudine Vinasithamby a la niña, Illayaal, impecables las dos en sus papeles.
Entre los secundarios se destaca Vincent Rottiers como Brahim el hombre duro y violento del suburbio cuyo destino terminará cruzándose con los recién llegados.
Audiard, como en otras ocasiones, cuida la imagen y la estética de la película mientras acompaña a este soldado que ha visto demasiado horrores confrontarse con sus sentimientos y temores mientras las cosas a su alrededor parecen complicarse cada vez más.
No todas las violencias son iguales y aunque todas son terribles algunas, simplemente, palidecen frente a otras.
Intensa, introspectiva, combina la observación intima de esta familia con secuencias de gran acción e intensidad mientras retrata la vida cotidiana de un suburbio parisino lleno de tensiones.