Sentir lo que los otros no
A Curtis lo ha despertado una pesadilla, es la primera de muchas que vendrán después. Parecía y se sentía real… no solo le produjo angustia y le ahogó un grito en la garganta., sus efectos nefastos parecen acompañarlo durante el día. No puede evitar sentir que se trata de un presagio, uno muy oscuro, una terrible catástrofe natural se acerca y pondrá en peligro su vida y la de su familia.
¿Será cierto? Jeff Nichols el director y guionista de Take shelter, Atormentado en español, nos adentra con precisión en esta cinta donde el miedo es el gran protagonista.
Curtis no puede huir de las imágenes aterradoras que percibe en la noche y que, lentamente, encontrarán la manera de escaparse de sus sueños e invadir su cotidianidad. ¿Se está volviendo loco o está teniendo la capacidad de ver y sentir lo que los demás no? ¿Debe cruzarse de brazos ante la posibilidad de morir y de ver morir a su familia?
De manera pausada, contenida, y a través de una hermosa fotografía la película va creando un ambiente de tensión y zozobra en el que se explora el temor de estar perdiendo la razón y el desconcierto de quienes rodean al afectado.
Take shelter se detiene en explorar el sin número de sensaciones y emociones encontradas que pueden surgir en semejante situación.
Curtis se debate entre callar su malestar o comunicarlo y percibir la mirada de horror en los otros. Carga, además, el saber que su madre, tras un ataque de psicosis quedó inhabilitada para vivir en sociedad. Ha llegado el momento de enfrentarse a ese pasado no ya como víctima de la madre sino como posible víctima de una mente que no consigue controlar.
La actuación medida y cargada de Michael Shannon, el encargado de darle vida al atribulado Curtis, es fundamental para mantener la tensión que genera este conflicto.
Silencios, frustración, rabia, la impotencia de la esposa que intenta comprender y no dejar solo al ser amado mientras éste parece sumergirse cada vez más en un abismo inexplicable, son parte de los diversos sentimientos que se exploran durante el desarrollo de la historia.
Finalmente, se puede decir que la fuerza de esta inusual película sobre hecatombes destructivas, tan en boga en este temido 2012, no está en su desenlace sino en las preguntas que va formulando, en las puertas que abre, y en la manera artística y sensible en la que se atreve a recorrer los vericuetos de una mente atormentada por la incertidumbre de lo que le está sucediendo.