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Cine

La hermandad (2010) Peter y Michael Spierig

By octubre 21, 2010diciembre 21st, 2015No Comments

♥♥♥

¿Quién dijo que no había nada nuevo por hacer en las películas de vampiros? Este año dos películas llegaron a la cartelera para demostrar lo contrario. Déjame entrar del sueco Thomas Alfredson (Samuel hizo una muy buena reseña sobre esta película) que es sin duda, de lo más interesante que se ha realizado sobre el tema en muchos años, seguida por la película de la que quiero hablar hoy La hermandad.

Corre el año 2019 una epidemia se ha extendido durante los últimos diez años convirtiendo a la mayoría de la población mundial en vampiro. El mundo se ha transformado para adaptarse a esta nueva realidad, se vive de noche y se duerme de día, se han construido túneles para transitar evitando los rayos solares, los carros poseen mecanismos de oscurecimiento total al interior con el mismo fin, entre otros inventos para mantener una vida “normal” tras la nueva situación.

Todo parece funcionar menos un pequeño detalle, la sangre humana sigue siendo el mejor y más completo alimento posible. Los humanos, esos traidores que se han negado a convertirse, han sido cazados a lo largo de los años para vaciarles la sangre. Existen empresas dedicadas a exprimirlos y vender el preciado líquido, el problema es que cada vez quedan menos, la sangre está empezando a escasear y, lo más grave de todo, es que un vampiro hambriento se transforma en una especie de monstruo loco, un pseudo murciélago gigante incapaz de controlar ningún impulso. Escenas de sublevación de estos seres transformados empiezan a replicarse en distintas ciudades, se avecina una grave crisis si no se encuentra un substituto rápido para la sangre humana.

   Edward Dalton (Ethan Hawke) trabaja en esa búsqueda. Sus motivaciones no son tan claras porque parece más movido  salvar a los humanos que a su propia especie. Él quisiera que el destino de aquellos que subsisten no fuera el de convertirse en esta especie de recipiente de comida que es vaciado. Inteligente, solitario, apesadumbrado Dalton no es como los demás, reniega de su destino y, como lo podremos saber más adelante, es vampiro en contra de su voluntad. El  destino querrá que se encuentre con un grupo de resistencia humano dirigido por Lionel Cormac (William Defoe) que ha realizado importantes descubrimientos en busca de una  cura para el vampirismo. El problema es que ese descubrimiento haría tambalear a las grandes multinacionales que comercializan sangre y que no tienen interés alguno en dejar el negocio atrás.

En esencia, como vemos, este mundo de vampiros dista poco del actual. Es así como La hermandad es muchas cosas a la vez: es una película sobre el poder concentrado en ciertas empresas y la manera cómo lo utilizan en la que priman intereses individuales sobre colectivos. Es, también, una película que reflexiona sobre la condición humana, los vampiros finalmente no dejan de ser una especie de animales, la inmortalidad no los ha hecho más sabios o mejores, por el contrario, la estabilidad de esta nueva sociedad pende de un hilo porque lo único que queda de humanidad, la sangre, es lo que mantiene el frágil equilibrio antes de que todos se devoren entre sí, animalizados, poseídos.  Edward, por ejemplo, a diferencia de su hermano Frankie  (Michael Dorman) que se siente feliz como vampiro,  añora la humanidad perdida y ansía recuperarla.

La resistencia humana no está dispuesta a dejarse ganar tan fácilmente, ellos son los daybreakers (título original prácticamente intraducible), que se puede interpretar como los que pueden aún ver el sol y esperan traer el amanecer. Efectivamente, esta es casi que la única ventaja que poseen, aunque no es nada despreciable, para enfrentarse con esos seres hambrientos que desean vaciarlos.

Diferentes historias se suceden alrededor de este conflicto, algunas terminan por concluirse  durante el transcurso de la película como la del conflicto entre padre e hija protagonizada por un poderoso vampiro y su hija que desea mantenerse como humana, otras quedan abiertas y abren la posibilidad a posibles secuelas.

Con escenas de alto gore, no apta para los que no soporten escenas violentas y sangrientas, La hermandad es una opción que, al mezclar diferentes géneros, termina por ser original.

Diana Ospina Obando

Diana Ospina Obando

Escribir, leer, ver películas, viajar...¿me faltó algo?